(DOMINGO 1/05) Como todos los años en numerosos países del mundo, se celebra el día del trabajo. Este es un día de justo homenaje para todas las personas que, de un modo o de otro, laboran para vivir. Aquellos que trabajan formal o informalmente. Para los que laboran y reciben ingentes ingresos, como para aquellos que apenas reciben una magra remuneración y también los que laboran sin recibir remuneración, es decir que lo hacen por vocación.
Un tributo merecido por la actividad de laborar que, más allá de cualquier actitud kitsch, en no pocas ocasiones afrenta, denigra y envilece. Afrenta, cuando se impone, se usa y se abusa de las personas por su necesidad de trabajar. Denigra, cuando se desoye la opinión de los trabajadores, asumiendo que son sólo piezas intercambiables y se les desacredita para removerlos; y envilece, cuando la remuneración que se da a cambio, apenas alcanza para el transporte y la manutención operativa del trabajador.
Johann W. Von Goethe el insigne escritor alemán, tenía un juicio que podría aparecer como inoportuno para esta fecha, pero aquí en Coaching Astral, pensamos que es de una oportunidad y de una vigencia impecables 237 años después de su publicación:
“Si me preguntas como es la gente de este país, te diré: 'Como la de todas partes.' La raza humana es harto uniforme. La inmensa mayoría emplea casi todo su tiempo en trabajar para vivir, y la poca libertad que les queda les asusta tanto, que hacen cuanto puedan por perderla. ¡Oh destino del hombre¡" Las tribulaciones del joven Werther (1774).
Ha de llegar el tiempo en que la codicia del capital ceda a las presiones de una mejor retribución del trabajo y será entonces cuando dejará de ser esa actividad asfixiante y castrante en la que se ha convertido y a la que se asimila a las personas como un modo evidente de control y sumisión. Mientras esto pasa tendremos que insistir en que las diferencias extremas son disfuncionales desde el punto de vista sociológico y sólo generan disonancias cognitivas entre los distintos estamentos de la sociedad humana.
¡Feliz día del trabajo!