(VIERNES 18/11/2011) Hace ocho días, después de retrogradar durante seis meses, Neptuno –el planeta considerado el visionario idealista del Zodiaco- volvió a avanzar, es decir: dejó de retroceder y volvió a tener movimiento directo. Desde el grado 28 de Acuario, en el que se encuentra ahora, avanzará para ingresar nuevamente al signo de Piscis, como ya sucedió en abril de este año.
Cuando Neptuno vuelva a su casa –en febrero de 2012- lo hará para no salir de ahí hasta el 27 de enero de 2026, fecha en la que recién ingresará al signo de Aries. No es que Neptuno no vaya a retrogradar, que es como los astrólogos llamamos al aparente movimiento de retroceso que describen los planetas en el Zodiaco; claro que retrogradará en todo este tiempo, pero al hacerlo no saldrá de Piscis, como sucedió en agosto de este año, que volvió a Acuario después de comenzar su "retroceso" el 4 de junio.
Importancia del movimiento directo de Neptuno hacia Piscis
Siempre que un planeta se encuentra en movimiento directo, sabemos que las cualidades de ese cuerpo celeste se manifiestan de modo asertivo, es decir con firmeza y seguridad. Estando en Acuario, signo en el cual Neptuno se encuentra de paso, sin que afecte su naturaleza, es de esperar que en los meses que le queda en el signo de el Aguador se acentúe a modo de despedida, ese mensaje de fraternidad, igualdad y de búsqueda de oportunidades para los menos favorecidos en el planeta.
Pero sin duda y como sucede siempre, lo mejor está por venir. En febrero de 2012 cuando Neptuno vuelva a ingresar a Piscis, como lo afirmamos en “Retorno e ingreso de Neptuno a Piscis”, comenzará un tiempo de grandes cambios; de propuestas ideales e idealistas, pero sobre todo un tiempo que habrá de sensibilizar a la humanidad acerca de la necesidad de cerrar las grandes brechas y las grandes diferencias económicas y sociales, entre las naciones y los estamentos o grupos poblacionales de una misma sociedad.
Las diferencias sociales que se acrecentaron en el último siglo y que han divorciado a los “lideres de las naciones” de los ciudadanos que las integran, serán duramente cuestionadas; como también se cuestionará el papel de los estados que a través de democracias formales y representativas, han legalizado la desigualdad y la discriminación.
A los indignados de todo el mundo los veremos multiplicarse durante el paso de Neptuno por Piscis, gracias al uso estructurado de la tecnología y de todos los medios de comunicación y concertación de los que hoy disponemos. Si Urano, el revolucionario del Zodiaco, no se encontrará en Aries como se encuentra; es muy probable que estos movimiento de lucha contra la desigualdad fueran más idealistas; pero debido a esto, precisamente, es de esperar que las protestas cada vez se tornen más violentas y cada vez más contestatarias, por lo cual es importante que quienes nos lideran asuman su responsabilidad con coherencia y cabalidad; asertiva pero no abusivamente. (Ver: No Se Culpe a Nadie)
Pero será en la vida espiritual, en las aspiraciones ideales e idealistas de la humanidad, en donde se expresará con mayor claridad la influencia que Neptuno en Piscis nos ha de traer. Es de esperar que entre el 2012 y el 2026 se abrirá paso una nueva humanidad, un nuevo hombre y un nuevo planeta. En estos años surgirán, modelos y teorías que habrán de revolucionar nuestro modo de convivir, para aprender que somos más viviendo de modo solidario y que la casa, la gran casa es una sola y la misma para todos.
Quiénes serán los primeros en recibir el influjo neptuniano
Las personas nacidas entre el 25 de diciembre de 1955 y el 16 de junio de 1957 –salvo indicación en contrario en su carta natal-, serán los primeros en experimentar el influjo positivo de este tránsito. Al nacer ellos tuvieron a Neptuno en los primeros grados de Escorpio y cuando éste vuelva a Piscis, se formará en sus cartas un Trígono que ha de sensibilizarlos y predisponerlo para desarrollar compasión, generosidad, misticismo y desprendimiento.
En cambio, las personas que nacieron entre el 7 de noviembre de 1970 y el 31 de diciembre de 1971, serán las que deben cuidarse de vivir -desde abril de este año y después cuando Neptuno vuelva a Piscis- momentos de confusión. Estas personas corren el riesgo de embarcarse en proyectos pocos prácticos e inalcanzables para sus posibilidades: El sentimiento de confusión y de inutilidad será cotidiano para estos nativos, que están padeciendo la Cuadratura de Neptuno en tránsito con Neptuno natal, que incluso los puede llevar a enfrentar problemas serios y muy complejos en su trabajo.
Para descargar este negativo e inevitable influjo neptuniano, es recomendable que dediquen su tiempo a trabajos parroquiales, voluntario o de beneficencia y, también, al arte, la música, el teatro y toda actividad que le permita, de un modo u otro, ayudar a los demás. Es decir: deben hacer con esfuerzo entre los 40 y 42 años -edad en la que se produce esta cuadratura-, lo que harán con más vocación entre los 54 y los 56 años, cuando se verifique el Trígono de Neptuno en tránsito con su Neptuno natal. Como siempre lo señalamos: "Todo aquí en la Tierra, está sujeto al ritmo y los ciclos de los planetas en el Cielo"
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